sábado, septiembre 03, 2005

Plaza Brasil

Y salgo de mi casa a decirle que lo amo. La larga y oscura avenida es testigo de mis pasos titubeantes, la estación del metro advierte que me acerco a su encuentro. Plaza Brasil es mi destino... niños jugando, amores naciendo y heridas sangrando. Los minutos pasan y el corazón me evidencia, sus latidos silencian el ruido de la noche. Él llega y no lo escucho... su indiferencia destruye mi espontáneo discurso, mis palabras de amor se derraman por el suelo y escriben el fin de una historia, una de tantas que ha muerto en la Plaza Brasil.

5 comentarios:

Cristián dijo...

QUE tal el amor?
suficiente motivo, no crees?

Jacinta dijo...

El amor siempre es motivo para todo... concuerdo contigo, para grandes alegrías y ni hablar de las penas, pero en fin, parece que es indispinsable conocer los dos lados de moneda...

Cristián dijo...

Pero tu decides con cual te quedas ;)

yo sinceramente, preferi el lado bonito del amor...dicen que no dura para siempre, pero esta en uno poder alargarla lo mas que se pueda y por donde yo veo, lo mio con la mirnita, va por muuuuucho tiempo mas, solo esta en uno!, no en los dos

Cristián dijo...

pd: mirnita, no estoy joteando :$

Jacinta dijo...

jajaja, me parece bien, me gusta tu estilo (y que no se enoje la Mirnita, porque no es nada personal)... obviamente siempre es mejor quedarse con el lado bonito, aunque claramente es difícil verlo cuando estás pasando por el lado negro, pero como dicen por ahí, no se puede conocer lo dulce sin probar lo amargo, así que comparto tu opinión.